Bragas de bikini

En cuanto se acerca el verano a todas nos entra el pánico, ¿está mi cuerpo preparado para esa braga de bikini que lleva todo el invierno en el armario? ¿me sentiré bien con tanto cuerpo destapado? Lo primero y más importante es que nos aceptemos a nosotras mismos y nos gustemos tal y como somos, pero también es verdad que podemos hacer algunas mejoras físicas que nos harán sentir mucho más seguras con nuestro cuerpo.

Y precisamente una de las partes que siempre más nos preocupa son los glúteos. La flacidez en esta zona es un problema estético que se puede cambiar. Existen muy buenas rutinas para hacer, tanto fuera como dentro del gimnasio, eso sí, siempre con regularidad y esfuerzo. En este artículo que hemos preparado, puedes aprender algunos ejercicios muy eficaces para reafirmar tus glúteos y ver resultados en tan solo un par de semanas.

Ten en cuenta que los glúteos son el grupo muscular más grande de tu cuerpo, lo que significa que son grandes quemadores de calorías, siempre que te pongas en movimiento, claro. Demuéstrale a tu culo un poco de dedicación con los cuatro ejercicios que te proponemos y verás como, en menos tiempo del que imaginas, ves cambios. Te resultarán de gran utilidad, tanto si los agregas a tu rutina habitual de ejercicio como si los combinas con un circuito más amplio de reafirmación. Sea como sea, este verano podrás lucir es braga de bikini que tienes guardada y disfrutarás del sol sin complejos.

Apoya codos, rodillas y antebrazos en el suelo. Aprieta el estómago y levanta una de tus piernas a la altura de la cadera, con la rodilla flexionada. Puedes hacer la patada tanto hacia arriba, como si quisieras tocar el techo con la suela del pie, o para atrás, estirando la pierna para que quede recta. En ambos casos, mantén la posición unos segundos. Puedes hacer ocho repeticiones con cada pierna y para agregar intensidad, usa pesas en los tobillos.

Este es, sin duda, el ejercicio para glúteos más completo. Por eso es el que siempre se debe hacer en primer lugar y es imprescindible en cualquier rutina. Además puedes añadir peso de distintas maneras, con una barra sobre los hombros, con unas mancuernas, o simplemente utilizando el peso de tu propio cuerpo. Separa los pies a la misma anchura que los hombros y flexiona las rodillas hasta que tu cuerpo descienda 90 grados. Repite la acción.

Túmbate en la colchoneta boca arriba y apoya las plantas de tus pies en el suelo, flexionando las rodillas. Entonces, realiza un movimiento de manera que la espalda quede diagonal al suelo. Mantén la posición durante unos segundos y vuelve a la posición original, pero siempre sin dejar que los glúteos lleguen a tocar la colchoneta, así mantendrás los músculos en tensión para que trabajen mejor. Diez repeticiones en cuatro rondas y ¡listo!

También se conoce como media sentadilla, ya que la pierna hace el mismo movimiento que cuando realizamos sentadillas, solo que esta vez trabajaremos las piernas de manera individual.

Al igual que pasa con las sentadillas, puedes añadir peso de diferentes maneras, con una barra, mancuernas o agarrando un disco con tus brazos. Nunca dejes que la rodilla delantera pase la línea de la punta del pie. Repite las mismas veces con cada pierna.